Museo Casa Diego Rivera
12 de junio al 28 de julio, 2024
Actualmente, caminar por las calles de una ciudad suele ser una acción acelerada que nos lleva de un sitio a otro, sin reparar en su carácter como práctica de ocio. El esfuerzo por encontrar resquicios de seres vivos no humanos entre lo artificial de los muros, la basura y ruidos urbanos es cada vez más complejo. En estos ambientes se simulan espacios naturales a través de parques o jardines que controlan dónde puede coincidir “lo humano” con “lo natural”.
Sin embargo, una escucha atenta y una apuesta por ralentizar nuestros pasos puede llevarnos a encontrar la existencia de seres sintientes cuya vida y adaptabilidad desobedece constantemente a la imposición antropocéntrica de las ciudades. En este sentido, Entramados sensibles es una exposición de Fernanda González Almanza que desde el contexto de Guanajuato, nos invita a reconocernos como cuerpos que cohabitan, se rozan y respiran en plurisonoridad con otros cuerpos.
Así, la obra de Fernanda activa la sinestesia donde diversos sentidos se estimulan al mismo tiempo. Las ramas desprendidas se convierten en seres-árbol que cubren los pavimentos de la ciudad; nuestros cuerpos responden a la sombra de las hojas que dejan su memoria en el asfalto y el agua corre triste generando vida incluso en la relación frágil de un ambiente contaminado y de explotación de las agroindustrias.
Frente a la pérdida de biodiversidad, Fernanda nos muestra las poéticas gestuales de los seres que pasan desapercibidos en la rapidez de lo urbano. En la práctica por crear relaciones conscientes y empáticas, su obra nos permite imaginar la sensibilidad del roce en estos ensamblajes hostiles —y vitales— que se entrelazan con nuestra existencia. Entramados sensibles redirige nuestros sentires para descubrir la intimidad profunda que se genera en el con-tacto con otros seres más allá de lo humano en la urdimbre fragmentada de las ciudades.
fernanda ramos mena x Lava
Curaduría y acompañamiento
fotos de registro Fernanda González Almanza
Curaduría y acompañamiento
fotos de registro Fernanda González Almanza